Tribuna de la verdad.
Reproduce el sentir del Periodista
Catalino Ortega recidente en EEUU.
No obstante vivo aquí en los Estados Unidos gracias a la tecnología y las redes sociales me entero de lo que sucede en mi país: se lleva a cabo actualmente un recuento de votos emitidos el 25 de junio recién pasado durante las elecciones generales para elegir presidente, diputados y alcaldes. Ese recuento lo ordenó la Corte de Constitucionalidad tras haber aceptado provisionalmente recursos presentados por varios de los partidos políticos perdedores en las urnas, acción que retiene el plazo que tiene el Tribunal Supremo Electoral-TSE- para oficializar los resutados. La actuación de los magistrados de la CC está fuera de contexto porque el TSE tiene toda la autoridad de acuerdo con el orden constitucional durante todo el proceso electoral y no puede intervenir la CC, por lo más parece que todo responde a un plan premeditado para evitar que haya una segunda vuelta que estaba fechada para el 20 de agosto con los 2 candidatos ganadores: Sandra Torres y Bernardo Arévalo. Lo que pretenden es imponernos al candidato que el oficialismo y quienes han hecho componendas con la corrupción que les sea favorable a sus propios intereses. Acusan a Bernardo Arévalo del partido Semilla, hijo del expresidente Juan José Arévalo- de ser comunista. A quienes formulan esa acusación les sugiero que se instruyan y dejen de ver al comunismo hasta en la sopa y no confundan el ser de izquierda progresista con comunismo. Que se respete la decisición de quienes emitieron su voto en las urnas porque todos los guatemaltecos queremos que se den importantes cambios en la forma en la que se ha venido implementando la política gubernamental. Ya no más de lo mismo. Fuera los corruptos de la administración pública